
¿Sabes cómo utilizar el aceite de oliva en la cocina?
Ahora puedes conocer los usos recomendados de los diferentes tipos de aceite...
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El objetivo de freír no es solo lograr el mejor sabor para los platos que preparas, también consiste en saber aprovechar el potencial del aceite que utilizas. Por esa razón, elegir el más adecuado resulta fundamental ya que así conseguirás frituras crujientes, además de saludables.
Para determinar qué tipo de aceite para freír es el más adecuado, antes debes valorar algún que otro factor que explicamos a continuación.
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Nunca viene mal recordar que el punto de humo es la temperatura máxima la que el aceite empieza a descomponerse, produciendo humo y liberando sustancias nocivas como la acroleína o las acrilamidas, responsables del olor conocido popularmente como "fritanga" y también de los efectos perjudiciales que esto conlleva para la salud.
Es decir, no todos los aceites son capaces de soportar el mismo calor. Entre los distintos tipos de aceite para freír puedes encontrar el aceite de orujo de oliva, cuyo punto de humo se sitúa en torno a los 238 º C, seguido del aceite de girasol (230 ºC) y el aceite de oliva virgen extra (210-220 ºC). Lo importante aquí es que el aceite que utilices sea rico en ácidos grasos monoinsaturados, haciendo que este se mantenga estable a altas temperaturas.
A pesar de contar con un punto de humor inferior a otros, el AOVE es una de las mejores elecciones que puedes tomar a la hora de freír. No solo posee un alto contenido en ácido oleico, sino que es rico en polifenoles y antioxidantes. Además, crea una capa que recubre el alimento, lo que impide que siga absorbiendo grasa.
Una vez elegido el tipo de aceite para freír, es importante que tengas en cuenta una serie de consejos. En primer lugar, usa una freidora con termostato para mantener la temperatura a 180 ºC como máximo. En el caso de que utilices una sartén, recurre a un termómetro de cocina.
Otro punto clave a tener en cuenta es que no debes mezclar un aceite nuevo con uno usado, ni tampoco diferentes tipos de aceites. Por otro lado, cuanta menos agua contenga el alimento, de mejor calidad será la fritura. Y tras usarlo, filtra el aceite para deshacerte de los restos de comida y recuerda no reutilizar ese mismo aceite más de tres veces ya que con cada fritura este pierde estabilidad.
Con todo, si lo que quieres es reducir la absorción de grasa de los alimentos que fríes, corta los alimentos en trozos grandes y fríelos con el aceite bien caliente, aunque sin llenar la sartén o la freidora.
Finalmente, es crucial que recicles debidamente el aceite usado. Por esa razón, no debes tirarlo por el desagüe, ya que eso puede contaminar el medio ambiente. Lo mejor es que lo guardes en un recipiente cerrado y que lo lleves a un punto limpio.
Como puedes ver, hay diferentes tipos de aceite para freír y el aceite de oliva virgen extra destaca por el sabor y las propiedades saludables que ofrece. Visita nuestra tienda online y elige el formato que prefieras.
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